Acabo de encontrar mi nuevo amigo para la depresión, osea, Chico Trujillo.
Como quizás en otra entrada mencioné, cuando me siento triste o mal o lo que sea, prefiero escuchar canciones bien felices y que me levanten el ánimo, no que me achaquen más. Aunque Chico Trujillo tiene letras de desamoríos, no me importa, la música y el ritmo y la ueá es bacán y me animan un poco.
Creo que en estos momentos debería comer pai de limón, sí, porque hablando con este caballero que es más o menos vecino mío, me acordé que puta que amo los pie de limón. Me hacen falta, así que esa es la meta de Enero: comer pie de limón, y bailar como imbecila Chico Trujillo, porque en estos momentos me acompaña y me hace felíz y sus letras me identifican.
Últimamente eso me pasa con las canciones que escucho, todo me identifica, o busco la forma de que lo haga. No sé si será para mejor o para peor, pero me hacen sentir especial. Mentira.
Oye, son las 2 y media de la mañana y derepente sentí como que estuviera volando :| creo que cada vez me estoy poniendo más y más loca.
Mmm.. Y ahora quién.
Decidí suprimir culaquier relación con vos. Así que anda a escuchar chico trujillo sola perra del sexo.
ResponderEliminarTe amo